El maquillaje alisa, matiza e ilumina la piel del rostro. Por ello, una buena base te permitirá camuflar y corregir las imperfecciones de tu piel dándole un aspecto homogéneo y resplandeciente.
Las últimas tendencias en pasarelas muestran cómo esta temporada la tez tiene una luminosidad extrema y sin imperfecciones. Una base bien elegida según tu tono y tu tipo de piel es el secreto para lucirla perfecta.
Los fondos de maquillaje líquidos o en crema han sido en los últimos años productos milagrosos que junto con los correctores e iluminadores han permitido a muchas mujeres tener siempre aspecto de buena cara.
Pues bien, la cosmética de color ha avanzado a pasos tan grandes que los elementos tratantes para cada tipo de piel se han ido uniendo al maquillaje en un mismo producto.
La base de maquillaje se aplica después de la crema hidratante para conseguir mejores resultados en la piel y dotar a la misma incluso a la más apagada de un resplandor excepcional borrando las pequeñas arrugas y zonas oscuras y suavizando el contorno del rostro.
Casi todas las mujeres notan en algún momento falta de resplandor, signos de cansancio, imperfecciones y alergias cutáneas que surgen a raíz de las distintas reacciones externas o internas a las que la piel está sometida.
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